Todavía sigo dando lata por internet, hasta cuando, no sé. Es sólo que estaba callada.

Ayer sorprendí a la Dr. N., jefa de mi mamá, echando sus orines a la calle. (Aunque usted no lo crea). La cosa fue así: Venía yo de caminar con mi amiga, cuando ella se asomó al frente de su casa con su bacinilla y echo un líquido a la calle. Mira!! - dijo mi amiga muerta de risa - esa mujer echó sus orines a la calle. Ella no sabe que esa es la Dr. N. jefa de mi mamá. Le digo que no puede ser verdad, que a lo mejor es agua. ¿Agua en una bacinilla? - me replica. Miro a su vecina, que está asomada a la ventana observándola de mala manera, negando con la cabeza. Mi mirada parece demandar una explicación, porque ella murmura: "echando los orines a la calle, eso es todos los días" "todos los días", repite, furiosa. Entonces sí que lo creo y todo parece encajar y me sorprendo y me muero de risa. Mi amiga me dice: tu sabes que la gente tiene muchas supersticiones. ¿Cómo? Sí, la gente echa los orines a la calle para alejar algo malo en específico, sólo que no recuerdo qué. Pero ella es una doctora! Sí, con el cerebro del tamaño de mi uña.